Hemos hecho un pequeño resumen/adaptación de la carta que nos ha enviado el colectivo de Intérpretes de Lengua de Signos de centros educativos públicos de la Junta de Andalucía, para difundir la situación que padecen y apoyarles en su lucha.
El Colectivo de
Intérpretes de Lengua de Signos de centros educativos públicos de la Junta de
Andalucía se ha vuelto a concentrar en diferentes ciudades de la comunidad
con el apoyo de sindicatos y entidades como UGT, CCOO, CGT y PADEI, así como
asociaciones de personas sordas, alumnos del ciclo de interpretación de lengua
de signos, alumnado sordo y funcionarios de educación pública, entre otros. El
objetivo principal de sus reivindicaciones es que la Junta de Andalucía los
asuma como Personal Laboral, proceso que inició en el año 2008 y que aún no ha
llevado a cabo.
Estos profesionales
realizan su trabajo en centros públicos, sirviendo de nexo comunicativo al
alumnado sordo con sus compañeros, profesores y demás profesionales del centro,
interpretando de la lengua oral a lengua de signos y viceversa para hacer
efectiva la comunicación.
Actualmente el servicio
de interpretación de lengua de signos en las aulas sale a concurso público cada
dos años, adjudicándoselo a la empresa privada que menor presupuesto pida para
llevarlo a cabo. Esto se traduce en el empeoramiento de las condiciones
laborales de los trabajadores cada vez que los contrata una nueva empresa, a la
par que se derrocha dinero público en intermediarios innecesarios.
El contrato de los
intérpretes se hace efectivo cada año el mismo día que se incorporan los
alumnos sordos a las aulas, no disponiendo de un tiempo previo para preparar el
material, coordinarse con el profesorado ni saber el curso que le tocará
interpretar ese año lectivo, tarea imprescindible para poder dar un servicio de
calidad y que al alumnado le lleguen las explicaciones aportadas por el
profesorado al 100%. Los intérpretes cuentan con un contrato discontinuo por el
que se van al paro cuando el alumno acaba el curso o causa baja, produciéndose
una incertidumbre laboral sobre cuándo acabará su contrato y qué centro le
asignarán el curso siguiente.
Los principales
afectados de esta situación son los alumnos sordos, que ven como la calidad del
servicio va cada año a peor sin que la Administración haga nada para solucionar
la problemática en la que se ven involucrados.
La próxima acción a realizar es una huelga
de dos días (18 y 19 de mayo) a nivel andaluz que culminará con una marcha
en Sevilla el 19 de mayo que comenzará a las 11:00 en la Plaza de la
Encarnación (Las Setas) y finalizará en el Parlamento de Andalucía.
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